Texto y fotografía_Amer Gourmet
Ron Botran nos invita a conocer los rincones más representativos de su país de origen en un viaje lleno de color y sabor.
Venancio, Andrés, Felipe, Jesús y Alejandro. Hace tres cuartos de siglo los hermanos Botran pusieron rumbo a Guatemala desde su Burgos natal para dar vida –entre volcanes, lagos de aguas cristalinas y campos de la mejor caña de azúcar– a una marca de ron que acabaría convirtiéndose en un emblema para el país. Una marca que, generación tras generación, mejora una receta familiar con más de 75 años de historia. Ron Botran no sería posible sin las características climáticas y topográficas únicas de Guatemala.
Un país perfecto para cultivar variedades de caña de maduración tardía, muy valoradas por su concentración de azúcares. En la Costa Sur guatemalteca se corta, lava y muele la caña para extraer el jugo que, tras someterse a un proceso de evaporación del agua, se convierte en miel virgen de caña de azúcar. Una vez fermentada, el ron se destila y termina añejándose en Quetzaltenango, a través de una adaptación del Sistema Solera.
Hoy Ron Botran nos invita a descubrir la magia y el encanto de un país de volcanes, manglares y bosques nublados de alta montaña. Imaginemos por un momento algunos de los rincones que los cinco hermanos Botran descubrieron y que les llevaron a asentarse en un país que ya está íntimamente ligado a la producción ronera.
Conocida como ‘Xela’, Quetzaltenango es la segunda ciudad más importante del país y el lugar donde se añejan los rones Botran. Solo dos de los volcanes de Guatemala cuentan con una laguna en el cráter y uno de ellos se encuentra aquí. Se trata de Chicabal, un lugar sagrado para los mayas. Inspirándonos en el sosiego del lugar, proponemos disfrutar de ‘La Laguna’, un cocktail intenso, largo y complejo, elaborado con Ron Añejo Botran 18, un ron robusto y suculento en el paladar, con notas de madera, cacao tostado, vainilla, frutos secos, especias y piel de naranja.
Sin duda los hermanos Botran debieron quedar impresionados con la grandeza del Lago Atitlán. Rodeado de volcanes, este bello lugar esconde un secreto, que los lugareños conocen bien. El viento Xocomil, a partir de media tarde, agita con fuerza el lago y hace que se intensifiquen las olas. Apostamos por disfrutar del paisaje en una hora más tranquila, la del aperitivo, con un cocktail que adopta el nombre del temido viento. ‘Xocomil’ combina el zumo de lima y piña con un vermut seco y Ron Añejo Botran 12, un ron explosivo y balanceado, con notas frutales, de almendras y nueces.
En Antigua Guatemala se encuentra ‘La Casa del Ron’, un lugar privilegiado donde degustar las mejores creaciones a base del ron patrio. Pero, sin duda, el punto más visitado de Antigua es el Arco de Santa Catalina. El color amarillo del arco se refleja en un cocktail elaborado con Ron Añejo Botran 8: cautivador e intenso en nariz, con toques tostados, notas de vainilla, frutas tropicales y frutos rojos. Suave en boca, muy delicado, equilibrado y armonioso.
El viaje por el sabor de Guatemala nos transporta hasta el departamento de Izabal, donde se encuentra una de las primeras áreas protegidas del país. El Río Dulce se extiende por más de 40 kilómetros llenos de manglares y ecosistemas acuáticos. Un canto a la vida que celebramos con un cocktail que es todo fuerza, frescor y vitalidad. Ron Añejo Botran 8, zumo de lima, puré de Pitahaya roja y soda de sandía: una propuesta perfecta para el verano.
Los jueves y los domingos Chichicastenango se convierte en una de las muestras más representativas de la fiesta que suponen los mercados en el país. Telas típicas, frutas de temporada, artesanía… Colores, sabores y aromas que hemos querido reflejar en ‘Chichicastenango Swizzle’, un cocktail fresco y afrutado, donde la papaya, el melón y la lima aportan todo el sabor de Centroamérica.
Tras las compras, toca calzarse las botas y subir alto, muy alto. Cerca de la frontera con México se alzan los imponentes 4.200 metros de altura del Tajumulco, el volcán más alto de Guatemala (y de Centroamérica). Un volcán extinto, que hacemos “revivir” con un cocktail sutilmente ahumado. Elaborado con el más maduro de los rones añejos Botran, su 18 años, seco, explosivo, lleno de notas de frutas caramelizadas, nuez moscada, pimienta, cacao tostado y delicados frutos cítricos.
El viaje llega a su fin con otra visita imprescindible, al Parque Nacional Tikal, la reserva cultural y natural más famosa de Guatemala. Un parque que alberga la ciudad maya más grande encontrada hasta hoy.
Verde y frondosa, donde emerge el templo del Gran Jaguar, que simbolizamos con una flor para decorar un colorido cocktail, elaborado con Ron Añejo Botran 8, un toque de Jerez, puré de manzana verde y de aguacate, zumo de lima y un toque de bitter de cardamomo.
Para disfrutar al 100% de esta aventura, aquí os dejamos las 7 propuestas de Ron Botran inspiradas en Guatemala:
LA LAGUNA
6 cl de Ron Añejo Botran 18
2,25 cl de Licor de Cereza
1 cucharadita de pimento Dram licor
1 dash de Angostura
Twist de Naranja
XOCOMIL
6 cl de Ron Añejo Botran 12
1,5 cl de Dry vermut
2,25 cl de Zumo de lima
3 cl de Zumo de piña
3 cl de Azúcar liquido Decoración: una hoja de piña y una rama de cilantro.
EL ARCO DE SANTA CATALINA
6 cl de Ron Añejo Botran 8
3 cl de Puré de fruta de la pasión 1,5 cl de Zumo de lima
2,25 cl de Azúcar líquido
1,5 cl de Licor cacao
1/2 fruta de la pasión para decorar
RIO DULCE
4,5 cl de Ron Añejo Botran 8
1,5 cl de Zumo de lima
2,25 cl de Azúcar líquido
3 cl de Puré de Pitahaya roja
Top Soda de sandía
6 cl de Ron Añejo Botran 8
2,25 cl de Zumo de lima
2,25 cl de Azúcar líquido
3 cl de Puré de melón Cantaloop
6 cl de Puré de papaya
2 dashes de angostura
Menta
TAJUMULCO
4,5 cl de Ron Añejo Botran 18
4,5 cl de Puré de piña asada con canela y jengibre
1,5 cl de azúcar líquido
1,5 cl de zumo de lima. Decoración: Rama de canela (se prende con un soplete para evocar el humo)
LA CIUDAD PERDIDA
6 cl de Ron Añejo Botran 8
Una cucharadita de Jerez
2,25 cl de Puré de manzana verde
1,5 cl de Zumo de lima
2,25 cl de Azúcar líquido
2,25 cl de Puré de aguacate
Un dash de bitter de cardamomo
Decoración: una flor comestible