Seguimos recuperando entrevistas realizadas para Shaking the Present. Esta vez de Massimo La Rocca un bartender que ha trabajado en varios locales de renombre en diferentes ciudades como el Claridge’s en Londres, el Bar Stravinskij en el hotel de Russie en Roma, el Sheen Falls Lodge Relais & Chateaux en Irlanda, el Mandarin Oriental y el boutique bar en el exclusivo hotel de cinco estrellas Ohla en Barcelona, entre otros.
(Al tratarse de una entrevista realizada algún tiempo algunos datos podrían haber variado un poco (como el lugar de trabajo actual, o el producto preferido del año, entre otros.)
¿Cómo comenzaste en la coctelería?
Empecé en 2006 en el Lab Bar de Senigallia en Italia, como camarero de Bar y Bar Back, mientras tanto me encontré con un amigo mío que es profesor en una escuela de Hostelería, que me convenció para asistir a un curso AIBES (La Asociación de Barmans Italianos).
¿Cuál es el bartender/formador de opinión que más admiras?
Stanislav Vadrna con su «Ichigo Ichie» que es una filosofía japonesa de como se debe atender a un cliente basándose en el concepto “UN ENCUENTRO, UNA OPORTUNIDAD0”, por lo tanto, la importancia del tiempo y de los detalles, cosas que para mí son “sagradas”. (La razón por la que en la foto de portada de este número de Drinksmotion llevo un reloj de bolsillo (tiempo) y una pinza de cirugía que agarra una coctelera muy pequeña).
¿Donde trabajas actualmente?
Trabajo como Supervisor de Bar en el Boutique Bar del Ohla Hotel, Barcelona situado en Via Laietana 49.
¿Qué tendencias ves en la coctelería en España?
Pienso que España está viviendo una gradual expansión de la «mixologìa» sólo en los últimos años, en un país «gobernado» por la Ginebra y el Gin Tonic, sin embargo hay un gran interés de los clientes (no sólo los jóvenes) por experimentar el mundo de la coctelería.
¿Qué tendencias ves en la coctelería en el mundo?
Al igual que en todos los ámbitos, la evolución llega a un punto donde tiene que «reconsiderarse a sí misma» y el mundo de los cócteles está viviendo un retorno a la mixología clásica (yo diría que a veces, con una búsqueda maníaca por muchos Barmans) cuyas fórmulas y recetas son la base de la coctelería moderna y, finalmente, el enfoque es un poco más sobre la salud del cliente ofreciendo cócteles más pequeños y creados con productos de calidad, así que los huéspedes puedan revivir el placer de saborear quizás más que un cóctel, sin “contraindicaciones exageradas”.
Si tuvieras que escoger un cóctel, ¿Cuál elegirías?
Un Americano, bien hecho por supuesto, con su sabor amargo pero al mismo tiempo refrescante y ligero, desde siempre mi compañero de viajes.
¿Cuál es el producto que ha salido este año que más te ha gustado?
Kammerling’s Ginger Spirit.
Si tuvieras que llevar 3 herramientas de coctelería a una isla desierta ¿Cuáles serian?
Una coctelera Cobbler, un buen cuchillo Japonés multi-uso….y uno contenedor isotérmico gigante con el hielo….para un tiempo 😉
Y si te tvuieras que llevar un espirituoso y dos licores ¿Cuáles serían?
Whisky, Chartreuse y Benedictine.
¿Como sería una noche perfecta para Max?
Una noche con una sinergia excelente entre los sentidos:
– Agradable compañía
– Ambiente cálido y acogedor
– Buena música
– Cócteles excelentes
– Buena comida
– Interacción agradable con el barman/camareros/anfitrión,
que harán todo lo posible para hacer de mi noche, una noche única.