Corren tiempos de gin-tonic y de cócteles de lo más innovadores, pero…¿qué hay del whisky? Uno de los reyes indiscutibles de la historia de los alcoholes, sin duda. Navegando, de una noticia a otra, hoy hemos dado con este artículo que la periodista Lourdes López publicaba en La Vanguardia el pasado 1 de noviembre. Echádle un ojo, es muy interesante! Y si os quedáis con ganas de más, pinchado AQUÍ accedéis a todas las entradas de nuestro blog en las que el whisky es el protagonista indiscutible
Cócteles de whisky vintage, más allá del gintonic
El gintonic llegó para quedarse, eso es indiscutible, y el vodkatonic –por mucho que se empeñen los cocteleros de este país- no acaba de arrancar entre el público. Con ese panorama irrumpen en las barras los cócteles de whisky envejecido en barrica, una suerte de tragos vintage capaces de gustar incluso a quienes no les gusta el whisky de por sí. Los expertos siempre aseguran que el whisky es el destilado más difícil de mezclar por su sabor intenso. De ahí que casi siempre se haya consumido España solo, pero la tendencia está cambiando.
Por segundo año algunos de los mejores cocteleros de España se han puesto las pilas -¡y como!- en el reto de crear cócteles con whisky madurado en barrica de roble americano, el reto de la II Edición Vintage Perfection Cocktails. En la edición de año pasado asumieron el reto primeras figuras de la coctelería como Alberto Pizzaro y Francesc Brateau en Barcelona o Carlos Moreno y Diego Cabrera en Madrid. Este año estos padrinos han dejado su legado (la barrica que usaron el año pasado) a unos herederos que han tomado el reto como propio. Será porque unos y otros son de los mejores bartenders de este país y así es fácil innovar y además acertar con el tiro y también porque la marca Glenrothers, que ha sido la creadora de este whisky vintage tan especial, les ha puesto un producto excelente entre manos. Las creaciones, en uno y otro caso han sido excepcionales. Pero ¿cómo es un whisky envejecido en barrica?
Cóctel de Yanaida Prado
Vaya por delante que para que un whisky pueda ser considerado whisky escocés de malta, es obligatorio, además de otras cosas, que sea envejecido durante al menos tres años en barricas de roble usadas previamente para el añejamiento de otras bebidas alcohólicas (burbón, jerez o cognac, normalmente). Así lo recoge la Scotch Whisky Act de 1988, la Orden del Whisky Escocés de 1990 y la Scotch Whisky Regulations de 2009. Cuanto más tiempo pasa en ellos, más matices coge el whisky, evoluciona, y así se vuelve de mejor calidad. Tomando estos datos como referencia nos hacemos a la idea de cómo es de especial un whisky de Glenrothes madurado 10 u 11 años (a veces hasta 20) y por qué está considerado como uno de los mejores whiskies de malta.
“Este innovador proceso dota a los cócteles de un gran carácter y múltiples matices que evolucionan”, afirma Carolina Gómez, Brand Ambassador de The Glenrothes y Nº3 Gin para España. Y única mujer embajadora de una marca de whisky en España.
Cóctel de Juanjo Gonzalez
A cada coctelero se le entrega una barrica de 5 litros para que haga probaturas con diferentes ingredientes para su creación y que luego lo deje madurar dentro el tiempo que considere oportuno y a la temperatura que le parezca adecuada. Así encontramos este año cócteles envejecidos 45 días en barrica, como el Zizzet Vintage de Yanaida Pardo de Milano cocktail bar que toma el testigo de Juanjo González (Caribbean Club). Juanjo creó un cóctel muy a la italiana envejecido 45 días en barrica con Glenrothes Reserve, rom blanco, vermouth seco, disaronno y gotas de lima. Por su parte, Yanaida utiliza Glenrothes select reserve, carpano fórnula antica, noilly Prat ambra, fernet branca, gran marnier amarillo, polvo de oro y frutas rojas.
El coctail del Giuseppe Baldi del Banker’s Bar del Hotel Mandarin de Barcelona, heredero de George Restrepo (Cocteleria Creativa) creador el año pasado Vía Florida, un coctail muy femenino envejecido 15 días en barrica con ingredientes como la fruta de la pasión, el agua de Jamaica y el Dtry de Curaçao. Baldi ha creado un cóctel madurado 49 días en barrica para el que usa Glenrothes Select Reserve, Leblon Cedilla licor de açai, lillet blanc, una gota de Bitter Truth Oragne y otra gota de Bitter Scrappy Cardamomo. Lo llama Toward the south.
Cóctel de Alberto Pizarro
El barman Alberto Pizarro, de Bobby Gin, ha creado el Getting Darker, un coctail madurado 30 días en barrica que –como indica su nombre- sorprende por su oscuro color. Utiliza The Glenrothes Select Reserve, cerveza Brooklyng chocolate desalcoholizada y desgasificada, Gabriel Boudier Guignolet de Dijon y gotas de bitter aromático y de cereza en una copa decorada con piel de naranja. Siguiendo esa misma línea de color, Sergio Padilla, de Bocachica, es el heredero de Pizarro y ha creado un cóctel madurado 7 días en barrica y otros 7 en botella. Usa The Glenrothes Select Reserve, pacharán artesano y un oloroso de 30 años de bodegas Tradición y lo sirve en un elegante vaso old fashion con un twist de naranja.
Estos son solo algunos ejemplos de la variada cocteleria vintage que puede conseguirse con este destilado. Con más de 500 años de historia. La verdad es que la variedad sorprende. A continuación os detallo todos los locales en los que podéis probar este tipo de cócteles, no solo en Madrid y Barcelona, en la edición de este año se han animado cocteleros de Oviedo, Gijón, Bilbao, Valledolid y Sevilla. ¡Bebed con moderación!